sábado, 15 de septiembre de 2012

Summer #2O12

Este verano no ha sido como los demás. Ha estado lleno de nuevas experiencias y sensaciones para mí como el tener que estudiar en pleno julio y sentir los nervios de antes de un examen importante a finales de agosto. Saber que me jugaba el curso en un último examen no me gustaba para nada, aunque lo llevara todo muy bien y al final acabara con un aprobado. Ya puedo decir que soy una alumna del bachillerato de ciencias, un paso más cerca de ir donde quiero estar.
He viajado y he podido ver a gente con la que sólo puedo hablar mediante las redes sociales, y he conocido a mucha más gente nueva y simpática. Aunque no haya podido ir a Málaga estas vacaciones me siento orgullosa de haber estado en las tierras tan bonitas que pisé, eso sí, el siguiente sin falta rumbo hacia allá, que tengo ya demasiadas ganas.
También he descubierto quiénes son de verdad mis amigos, no porque me haya pasado algo y no hubieran estado allí, sino porque conforme crecemos esas cosas se van viendo y yo ya sé en quién puedo confiar y en quién no. La verdad es que no me imaginaba que gente con la que antes hablara tanto nuestra relación acabara de esta manera aunque, sinceramente, era de esperar, sólo era cuestión de tiempo. No pueden quejarse de falsedad cuando es evidente que ellos también lo son, está en la naturaleza del ser humano serlo a veces.
He echado en falta a bastante gente que antes compartía conmigo veranos pero la vida no va a ser siempre como a mí me guste y toca afrontar el presente sin agobiarse por el futuro y sin estancarse en el pasado.
En resumen ha sido un buen verano, no de los mejores, pero he podido reflexionar y crear nuevas emociones y experiencias que me ayudarán durante este curso.