miércoles, 29 de junio de 2011

Ponte en el lugar de la otra persona.

Sabes, te propongo jugar a un juego. Cambiémonos los papeles. Tú serás el chico bueno que espera ansioso delante del teléfono, esperando esa llamada que nunca llega, el que se pasa los días pensando "qué hará" o "por qué no me llama". El que no pueda dormir por las noches buscando el por qué no te quiero. Ahora yo soy la chica mala, la que se va por ahí y no vuelve hasta las mil, importándole más bien nada tus sentimientos o lo que pienses, la que dice que te llamará pero nunca lo hará. La que duerme cada noche con alguien diferente. La que sabe que siempre te tendrá ahí y harás lo que te pida y cuando te lo pida. ¿A que no te gusta ese papel? ¿Prefieres ser el chico malo, verdad?
Ahora ya sabes cómo se siente una tonta enamorada.